Sociedad vs. Partidos Políticos.
Hoy mas que nunca existe una gran inconformidad con los partidos políticos en México, hoy somos mas quienes exigimos cambios urgentes en el modelo de democracia representativa que han construido los partidos políticos a espaldas de una ciudadanía a quien dicen representar.
Hoy la sociedad se encuentra sin organizaciones que la fortalezcan o le permitan avanzar en la dirección que desean las mayorías. Grandes grupos sociales no tienen organizaciones que les permitan incidir en el curso de los acontecimientos sociales, políticos y económicos en nuestro país.
La corrupción se ha desbocado, la ambición por el poder y los privilegios que conlleva, dominan el quehacer político y a la mayoría de nuestros "representantes".
Sostengo que la corrupción, la ineficacia, el enfrentamiento permanente entre partidos, la inmadurez de la ciudadanía y de todos los actores políticos en Mx es resultado directo del modelo de democracia representativa que prevalece en nuestro país.
La democracia representativa genera la corrupción que nos ahoga.
La corrupción desenfrenada que vemos todos los días, es resultado directo de un modelo de democracia y de partidos que buscan hacerse del poder, regulados por un sistema de elecciones programadas, mediante campañas propagandísticas mas que de difusión de ideas y propuestas de política pública.
Resulta obvio que si un partido quiere ganar el poder mediante votos, la meta principal de éstos es precisamente lograr los votos de la manera más eficiente posible. Ahí está el origen de la corrupción, para ganar elecciones, los partidos sólo tienen que convencer a los electores que voten por ellos y tienen a su disposición los despachos de publicidad mas modernos y las encuestas necesarias, que les permiten detectar los botones que deben apretar para que el ciudadano "compre" un determinado partido (como si fuese un producto comercial) el quid de la cuestión es el alto costo de éste tipo de campañas y a éste hay que sumar el costo para comprar directamente a grandes grupos de votantes con "regalos" promocionales u ofrecimientos de beneficios económicos en efectivo o con recursos de programas asistenciales que se multiplican como hongos y además el costo de evadir todas las disposiciones que prohíben que ésto se haga.
Las reglas las fijan ellos (los partidos), no la sociedad. Los límites y monto de financiamiento los determinan sus propias necesidades no las de la sociedad. El uso de los recursos lo verifican ellos, no la sociedad.
De ahí que los partidos políticos estén cada vez mas alejados y enfrentados con los objetivos de la mayoría de la sociedad (al menos la que se interesa por los asuntos políticos).
Si ganar elecciones representa un gran botín económico y además te protege con un fuero que te da impunidad, es la combinación perfecta para que los personajes mas deshonestos, incluidos criminales comunes, estén interesados en llegar a ése paraíso a como de lugar, cueste lo que cueste.
La democracia representativa (DR) como la diseñaron los partidos políticos en Mx, genera toda clase de corrupción, porque al tener que dejar los cargos al cabo de 3 o 6 años, los políticos se ven obligados a hacer todo tipo de manejo fraudulento de los recursos públicos para crearse una imagen personal atractiva por medio de la propaganda electoral encubierta y así poder saltar de un puesto a otro y seguir gozando de mas recursos e impunidad.
Si para ganar elecciones es necesario, no el oficio político (sea lo que signifique ése término), sino contar con abundantes recursos para hacer una campaña mediática que te "posicione" como un producto deseable, hay una gran motivación para usar tu cargo público para desviar recursos ilegalmente y hacer uso de los recursos ilegítimos a que puedas tener acceso.
Si un partido político no obtiene votos está muerto. No importan sus propuestas, si éstas son adecuadas o no, el partido desaparece porque muere de inanición al no recibir el financiamiento público, y se encontraría en desventaja con respecto de los otros partidos que sí ganan votos y los recursos que éstos representan.
El apetito insaciable de los partidos por recursos legítimos e ilegales, es imposible de saciar si continúa el mismo esquema de campañas electorales basadas en spots comerciales y con elecciones programadas. La solución a esto es simple y se puede lograr mediante dos simples medidas, que por supuesto no aprobarán los partidos políticos: 1) Prohibir todo financiamiento con recursos públicos a partidos y campañas políticos y 2) Prohibir toda clase de propaganda política o de promoción personal o de "logros" de gobierno, tanto de personajes públicos que busquen un cargo de elección popular, como de los 3 ordenes de gobierno.
Si no se adopta estas dos medidas tan simples y se hacen valer, inhabilitando al aspirante a candidato o destituyendo al servidor público que la viole, es porque no quieren, no porque haya razones válidas para no hacerlo.
Mientras continúen las campañas basadas en spots habrá corrupción y las elecciones serán cada vez mas caras y las prerrogativas de los partidos serán mas y mas altas como lo estamos viendo hoy.
La mayoría de la sociedad queremos que dejen de usar el presupuesto público para financiar sus campañas, que usen ésos recursos cada vez mas escasos en fincar las bases de un crecimiento económico sólido, sostenido y autosustentable, que permita a cada vez mas mexicanos salir de la pobreza y aspirar a una vida mejor.
El uso de recursos públicos de manera ilegal para ganar elecciones es muy difícil de probar, pero éso no significa que no exista. La vías de la impunidad han sido construidas durante muchos años por una casta de políticos venales que solo quieren seguir viviendo del presupuesto.
La propia sociedad se corrompe en éste sistema vil ya que los partidos hacen uso de la ignorancia y pobreza de grandes capas de la población para comprar sus votos con "regalos promocionales" de todo tipo sin que se den cuenta que votar por ésos partidos, es la raíz de su pobreza e ignorancia.
Los empresarios saben que para lograr una venta al gobierno para recibir un contrato para cualquier obra pública le deben "entrar" con un "moche", y así desde el secretario hasta el último peldaño de la burocracia se le debe "aceitar" con dinero para lograr obtener cualquier trámite o servicio que debiera ser gratuito.
Así se genera la "cultura" de la corrupción en nuestro país. Así podemos erradicarla para siempre y convertirnos no en una democracia incipiente sino en una nación plenamente democrática de la cual podamos sentirnos orgullosos.
Los empresarios saben que para lograr una venta al gobierno para recibir un contrato para cualquier obra pública le deben "entrar" con un "moche", y así desde el secretario hasta el último peldaño de la burocracia se le debe "aceitar" con dinero para lograr obtener cualquier trámite o servicio que debiera ser gratuito.
Así se genera la "cultura" de la corrupción en nuestro país. Así podemos erradicarla para siempre y convertirnos no en una democracia incipiente sino en una nación plenamente democrática de la cual podamos sentirnos orgullosos.
La democracia representativa genera ineficacia en el gobierno.
La ineficacia gubernamental y de las políticas públicas, es producto de nuestro sistema político, porque los funcionarios, una vez que llegan al poder, saben que estarán en él unos cuantos años, y que lo tendrán que abandonar, así posean las mayores calificaciones, conocimientos y sobre todo experiencia para desempeñar excelentemente su trabajo.
Por ello su principal preocupación es ¿como voy a ganar la siguiente elección? y a eso deben dedicar todo su esfuerzo, talento y tiempo, no a desempeñar las responsabilidades inherentes a los cargos por los que reciben excelentes sueldos, prestaciones y privilegios muy por encima de los que recibimos los trabajadores en general.
La DR que padecemos en Mx crea una gran inmadurez de todas las instituciones y de la grandes mayorías de la población, porque para que una institución madure, es necesario que se sigan políticas públicas que necesitan tiempo para elaborarse, planear su implementación, ponerse en práctica, evaluarse y controlar que rindan los frutos que de ellas se esperan.
Nada de ello es posible con unas elecciones programadas cada 3 o 6 años que recambian de golpe a toda la estructura de conocimiento y mando necesario para que sean eficaces. No solo éso, además las propias políticas, los objetivos de las políticas publicas así como los recursos asignados para lograr los objetivos sociales se cambian cada que cambian las personas que las encabezan.
Sumemos a éste efecto inevitable de una DR, el apetito voraz que se despierta en un funcionario que no está sujeto a prácticas sistemáticas de transparencia en el uso de los recursos y que goza cabal impunidad debido al fuero que llega con el cargo. Se configura así las condiciones perfectas para que no importa cuanto publiciten sus logros, éstos no se notan en una población que ve como sus gobernantes cada vez se alejan mas de la realidad que vivimos.
La falta de credibilidad es resultado de un discurso demagógico que solo existe en las mentes de la élite gobernante, no importa si tienen buenas intensiones o no, el hecho es que se usan recursos valiosos y escasos de una manera irresponsable y corrupta y por ello no hay garantía de que se obtendrán los beneficios esperados por las millonarias inversiones públicas. La sociedad no se ha dado cuenta que es su derecho inalienable el pedirle cuentas a los políticos que eligió no como amo sino como empleados nuestros.
Sin un sistema de control y rendición de cuentas eficaz, deja impunes a todos los funcionarios del gobierno, y es una señal clara para que los trabajadores públicos de los niveles mas bajos actúen como lo hace el jefe, de manera despótica y sin respetar al verdadero dueño de los recursos de los cuales viven, se pierde en el anonimato que cada peso que cobra el burócrata de menor nivel hasta el secretario es dinero aportado por la sociedad, recursos de los cuales ellos son simples administradores no dueños.
Esto crea una mentalidad de dependencia entre la sociedad que tiende a pensar que "papá gobierno" le resolverá los problemas con recursos que no imaginan que son fruto de su esfuerzo y trabajo diario.
Así se crea una dependencia perversa donde el dueño se convierte en el esclavo, donde la sociedad es víctima de los empleados que ella misma ha contratado. Por ello la sociedad suplica y pide, no exige ni despide a los malos administradores.
Como resultado de un régimen de partidos financiados con recursos públicos, repartidos mediante reglas puestas por ellos, no por la sociedad, se crea un sistema en el cual ningún partido aceptará bajo ninguna circunstancia que el partido que gobierna, está haciendo bien las cosas, porque eso significaría que sólo ése partido se beneficiará del sistema de corrupción existente. Por ello se obstaculizan toda clase de propuestas y se impide con toda clase de mentiras, falsas acusaciones que no generan denuncias ni juicios legales, pero que desprestigian y calumnian al partido en el gobierno.
Es una estupidez desde cualquier punto de vista, financiar con recursos públicos a los partidos y campañas políticos, ello genera solo la existencia de partidos/empresas que benefician no a la sociedad que los financia, sino a sus dirigencias, así ¿como podemos exigir que los partidos tomen en cuenta a la sociedad que pone los recursos de los que viven? es imposible, los partidos seguirán existiendo mientras cuenten con un 3% de votos que fácilmente pueden lograr invirtiendo parte del botín en campañas publicitarias que engañen y mantengan en la ignorancia al grueso de la población.
No digo que los partidos deban desaparecer, de hecho propongo que se eliminen TODAS las reglas para la formación de todos los partidos que la sociedad desee tener, pero que existan con los recursos que su militancia les pueda proveer.
Ya escucho las voces que desde la izquierda se elevan contra esta idea, diciendo que es un crimen quitar el financiamiento público a los partidos, afirman interesadamente que ellos necesitan salvar a las masas empobrecidas de los ricos con sus millones que fácilmente pueden ganar todas las elecciones.
Que gran engaño! una persona representa un voto! no importa si es del mas rico o del mas pobre de la sociedad, por ello es requisito prohibir las campañas políticas por medio de spots comerciales, así no serán necesarias cantidades millonarias para efectuar campañas informativas en tiempos del Estado en medios masivos como la radio y la TV donde los partidos cuenten con tiempo suficiente en horarios de alta audiencia para emitir sus propuestas (no sus comerciales de 30 segundos que no dicen nada y engañan), así el elector sabrá por qué vota por uno u otro partido.
Los partidos que representen a parte del electorado no deben tener problema para hacerse de los recursos privados que pueda aportar su militancia y que debe estar sujeto a topes máximos y a una rigurosa fiscalización de su origen por el SAT.
Así nos aseguramos que haya políticos milicianos, realmente interesados en que el país salga adelante convirtiéndose en voceros de las demandas legítimas de la sociedad, y no simples empresarios del engaño y la demagogia que viven del presupuesto público.
También la DR genera la gran inmadurez que presenta nuestra democracia y sobre todo una ciudadanía desconectada de todo lo que signifique la política y la participación en el logro de los resultados que buscamos como país.
En un sistema electoral basado en spots comerciales, los partidos políticos recurren a la "promesa fácil" que ellos si son honestos y terminarán la corrupción que ellos mismos crearon, que ellos sí pueden reactivar la economía, que ellos son los mas eficaces administradores y que por ello ellos si saben gobernar.
La terca realidad nos demuestra que cada 3 años volvemos a escuchar las mismas ofertas, por los mismos actores y las cosas siguen empeorando.
¿Por que la ciudadanía sigue legitimando con votos este sistema perverso de organización electoral? por simple ignorancia, por simple inmadurez que el propio sistema produce, es más fácil esperar que llegue "el bueno" el que "ahora sí" va a resolver los problemas mientras la sociedad se debate entre la rabia y la frustración de ver que nuevamente ha sido engañada y no poder hacer nada.
Sólo asumiendo una actitud responsable sobre los resultados de nuestras elecciones como sociedad podemos madurar e ir aprendiendo a reconocer a los buenos administradores sobre los populistas que solo engañan con la mentira que ellos si pueden dar todo a cambio de nada.
En una DR como la nuestra, no existen incentivos para modificar un sistema que beneficia a la minoría que goza de toda clase de privilegios que ellos mismos se aprueban, sin tener que rendir cuentas a nadie del uso que hacen de NUESTROS recursos escasos.
Mientras la sociedad siga inmadura, pensando que el gobierno es una especie de Dios que resuelve los problemas por gracia divina, seguiremos dependiendo de los políticos salvadores de la patria que nos llevarán a la tierra prometida "algún día" si "nos portamos bien".
Solo la sociedad tiene la fuerza para resolver los graves problemas que entraña hacer crecer el empleo, los ingresos, disminuir la pobreza de grandes capas de la población y la desigualdad en la distribución del resultado del esfuerzo de todos.
Por ello urge que la sociedad asuma su papel como origen y destino de toda política pública que haga uso de recursos públicos, que siendo de todos, una mayoría absoluta (50% +1) debemos decidir en qué se emplean y quien debe administrarlos.
La DR también genera inmadurez en la función pública porque cada 3 o 6 años se deben recambiar de golpe todos los cuadros que costó muchísimos recursos valiosos capacitar y que cuentan con toda la experiencia necesaria para ejercer la administración pública de forma mas eficaz, por ello siempre estamos comenzando de cero cada 3 o cada 6 años y no madura ninguna política pública.
Por ello propongo:
En estos momentos es posible construir con relativa facilidad un nuevo pacto social, sin tener que crear un conflicto armado que origine una nueva revolución mexicana. Sin derramar sangre, y sobre todo que beneficie a todos, incluidos los que se están beneficiando de forma exclusiva, ahora desde el poder, que si en verdad son buenos políticos se darán cuenta de ello y aceptarán negociar el cambio de paradigma, y si no pues terminarán en donde corresponde (en la cárcel).
La sociedad en México tenemos este año una gran oportunidad para manifestar un rechazo generalizado hacia todos los partidos políticos, tenemos elecciones federales para renovar toda la cámara de diputados. Y múltiples elecciones locales para renovar gobernador y congresos locales.
Si tu eres de los que pensamos que ningún partido político hace una diferencia real, te invito a que anules tu voto, no lo regales al "menos malo" como si votar por UN partido fuese obligatorio, no lo es.
Tenemos los electores otra opción: invalidar nuestros sufragios, y si es de forma masiva, los partidos políticos no podrán ignorarnos. Porque podemos fácilmente pasar de una simple anulación masiva de votos a formas mucho mas poderosas de desobediencia civil pacífica, dado que seremos una gran parte de la ciudadanía exigiendo, podemos obligarlos a transformar el régimen político de nuestro país.
Para hacer realidad esto se requiere que ésa mayoría reflejada en una anulación masiva de votos, tenga un programa claro, coherente y viable de cambios que se requieren, propongo los siguientes:
1) Eliminar totalmente el financiamiento con recursos públicos a partidos/campañas, eliminar también totalmente todo tipo de propaganda electoral para promover a personas o partidos políticos o servidores públicos.
2) Eliminar todas las restricciones que tramposamente, han puesto los partidos políticos a las iniciativas/consultas populares y a las candidaturas independientes, así cómo a los requisitos para formar un partido u organización políticos, limitándolo únicamente a un simple aviso a la autoridad electoral.
3) Emitir una ley de revocación de mandato por medio de referendo, que incluya la eliminación de todos los fueros constitucionales, incluido principalmente el del presidente de la república.
4) Elección por medio de voto directo y secreto, de jueces y magistrados de todos los niveles, así como del procurador general de la república.
Con estas medidas la sociedad podrá empezar a construir, con las propuestas de especialistas de la sociedad civil y académicos las propuestas que deberán ser votadas en consultas populares y por medio de iniciativas populares.
Sin la herramienta de una consulta popular que pueda revocar cualquier reforma constitucional o secundaria los partidos podrán seguir gobernando en nuestro nombre y con nuestro aval indirecto, que no esté debidamente sustentada con argumentos válidos y con el estudio y debida ponderación de toda la sociedad.
Si los partidos siguen disfrutando de recursos públicos ilimitados seguirán adueñados de toda la vida política del país dejando en la marginación no solo económica, también política a toda la población.
La elección de jueces y magistrados de todos los niveles del poder judicial, permitirá vigilar y premiar a aquellos servidores públicos en el ejercicio de esta alta responsabilidad que siempre debe estar al servicio de los intereses de la sociedad no a los de los grupos de poder.
El poder para construir un México digno está en cada voto, no lo desperdicies este junio 2015, absteniéndote de ir a votar solo refuerzas el poder tal como está. Expresa clara y contundentemente con un voto anulado, tu rechazo a seguir legitimando y manteniendo con vida artificial a un sistema que está muerto y en pleno estado de putrefacción y al que hay que enterrar a la brevedad por la salud del país.
Nada de ello es posible con unas elecciones programadas cada 3 o 6 años que recambian de golpe a toda la estructura de conocimiento y mando necesario para que sean eficaces. No solo éso, además las propias políticas, los objetivos de las políticas publicas así como los recursos asignados para lograr los objetivos sociales se cambian cada que cambian las personas que las encabezan.
Sumemos a éste efecto inevitable de una DR, el apetito voraz que se despierta en un funcionario que no está sujeto a prácticas sistemáticas de transparencia en el uso de los recursos y que goza cabal impunidad debido al fuero que llega con el cargo. Se configura así las condiciones perfectas para que no importa cuanto publiciten sus logros, éstos no se notan en una población que ve como sus gobernantes cada vez se alejan mas de la realidad que vivimos.
La falta de credibilidad es resultado de un discurso demagógico que solo existe en las mentes de la élite gobernante, no importa si tienen buenas intensiones o no, el hecho es que se usan recursos valiosos y escasos de una manera irresponsable y corrupta y por ello no hay garantía de que se obtendrán los beneficios esperados por las millonarias inversiones públicas. La sociedad no se ha dado cuenta que es su derecho inalienable el pedirle cuentas a los políticos que eligió no como amo sino como empleados nuestros.
Sin un sistema de control y rendición de cuentas eficaz, deja impunes a todos los funcionarios del gobierno, y es una señal clara para que los trabajadores públicos de los niveles mas bajos actúen como lo hace el jefe, de manera despótica y sin respetar al verdadero dueño de los recursos de los cuales viven, se pierde en el anonimato que cada peso que cobra el burócrata de menor nivel hasta el secretario es dinero aportado por la sociedad, recursos de los cuales ellos son simples administradores no dueños.
Esto crea una mentalidad de dependencia entre la sociedad que tiende a pensar que "papá gobierno" le resolverá los problemas con recursos que no imaginan que son fruto de su esfuerzo y trabajo diario.
Así se crea una dependencia perversa donde el dueño se convierte en el esclavo, donde la sociedad es víctima de los empleados que ella misma ha contratado. Por ello la sociedad suplica y pide, no exige ni despide a los malos administradores.
La DR genera enfrentamiento entre partidos que impide u obstaculiza el logro de resultados.
Es una estupidez desde cualquier punto de vista, financiar con recursos públicos a los partidos y campañas políticos, ello genera solo la existencia de partidos/empresas que benefician no a la sociedad que los financia, sino a sus dirigencias, así ¿como podemos exigir que los partidos tomen en cuenta a la sociedad que pone los recursos de los que viven? es imposible, los partidos seguirán existiendo mientras cuenten con un 3% de votos que fácilmente pueden lograr invirtiendo parte del botín en campañas publicitarias que engañen y mantengan en la ignorancia al grueso de la población.
No digo que los partidos deban desaparecer, de hecho propongo que se eliminen TODAS las reglas para la formación de todos los partidos que la sociedad desee tener, pero que existan con los recursos que su militancia les pueda proveer.
Ya escucho las voces que desde la izquierda se elevan contra esta idea, diciendo que es un crimen quitar el financiamiento público a los partidos, afirman interesadamente que ellos necesitan salvar a las masas empobrecidas de los ricos con sus millones que fácilmente pueden ganar todas las elecciones.
Que gran engaño! una persona representa un voto! no importa si es del mas rico o del mas pobre de la sociedad, por ello es requisito prohibir las campañas políticas por medio de spots comerciales, así no serán necesarias cantidades millonarias para efectuar campañas informativas en tiempos del Estado en medios masivos como la radio y la TV donde los partidos cuenten con tiempo suficiente en horarios de alta audiencia para emitir sus propuestas (no sus comerciales de 30 segundos que no dicen nada y engañan), así el elector sabrá por qué vota por uno u otro partido.
Los partidos que representen a parte del electorado no deben tener problema para hacerse de los recursos privados que pueda aportar su militancia y que debe estar sujeto a topes máximos y a una rigurosa fiscalización de su origen por el SAT.
Así nos aseguramos que haya políticos milicianos, realmente interesados en que el país salga adelante convirtiéndose en voceros de las demandas legítimas de la sociedad, y no simples empresarios del engaño y la demagogia que viven del presupuesto público.
La DR genera inmadurez en la sociedad y en la función pública.
En un sistema electoral basado en spots comerciales, los partidos políticos recurren a la "promesa fácil" que ellos si son honestos y terminarán la corrupción que ellos mismos crearon, que ellos sí pueden reactivar la economía, que ellos son los mas eficaces administradores y que por ello ellos si saben gobernar.
La terca realidad nos demuestra que cada 3 años volvemos a escuchar las mismas ofertas, por los mismos actores y las cosas siguen empeorando.
¿Por que la ciudadanía sigue legitimando con votos este sistema perverso de organización electoral? por simple ignorancia, por simple inmadurez que el propio sistema produce, es más fácil esperar que llegue "el bueno" el que "ahora sí" va a resolver los problemas mientras la sociedad se debate entre la rabia y la frustración de ver que nuevamente ha sido engañada y no poder hacer nada.
Sólo asumiendo una actitud responsable sobre los resultados de nuestras elecciones como sociedad podemos madurar e ir aprendiendo a reconocer a los buenos administradores sobre los populistas que solo engañan con la mentira que ellos si pueden dar todo a cambio de nada.
En una DR como la nuestra, no existen incentivos para modificar un sistema que beneficia a la minoría que goza de toda clase de privilegios que ellos mismos se aprueban, sin tener que rendir cuentas a nadie del uso que hacen de NUESTROS recursos escasos.
Mientras la sociedad siga inmadura, pensando que el gobierno es una especie de Dios que resuelve los problemas por gracia divina, seguiremos dependiendo de los políticos salvadores de la patria que nos llevarán a la tierra prometida "algún día" si "nos portamos bien".
Solo la sociedad tiene la fuerza para resolver los graves problemas que entraña hacer crecer el empleo, los ingresos, disminuir la pobreza de grandes capas de la población y la desigualdad en la distribución del resultado del esfuerzo de todos.
Por ello urge que la sociedad asuma su papel como origen y destino de toda política pública que haga uso de recursos públicos, que siendo de todos, una mayoría absoluta (50% +1) debemos decidir en qué se emplean y quien debe administrarlos.
La DR también genera inmadurez en la función pública porque cada 3 o 6 años se deben recambiar de golpe todos los cuadros que costó muchísimos recursos valiosos capacitar y que cuentan con toda la experiencia necesaria para ejercer la administración pública de forma mas eficaz, por ello siempre estamos comenzando de cero cada 3 o cada 6 años y no madura ninguna política pública.
Por ello propongo:
Una democracia participativa puede regresar el poder donde corresponde: a la sociedad.
En estos momentos es posible construir con relativa facilidad un nuevo pacto social, sin tener que crear un conflicto armado que origine una nueva revolución mexicana. Sin derramar sangre, y sobre todo que beneficie a todos, incluidos los que se están beneficiando de forma exclusiva, ahora desde el poder, que si en verdad son buenos políticos se darán cuenta de ello y aceptarán negociar el cambio de paradigma, y si no pues terminarán en donde corresponde (en la cárcel).
La sociedad en México tenemos este año una gran oportunidad para manifestar un rechazo generalizado hacia todos los partidos políticos, tenemos elecciones federales para renovar toda la cámara de diputados. Y múltiples elecciones locales para renovar gobernador y congresos locales.
Si tu eres de los que pensamos que ningún partido político hace una diferencia real, te invito a que anules tu voto, no lo regales al "menos malo" como si votar por UN partido fuese obligatorio, no lo es.
Tenemos los electores otra opción: invalidar nuestros sufragios, y si es de forma masiva, los partidos políticos no podrán ignorarnos. Porque podemos fácilmente pasar de una simple anulación masiva de votos a formas mucho mas poderosas de desobediencia civil pacífica, dado que seremos una gran parte de la ciudadanía exigiendo, podemos obligarlos a transformar el régimen político de nuestro país.
Para hacer realidad esto se requiere que ésa mayoría reflejada en una anulación masiva de votos, tenga un programa claro, coherente y viable de cambios que se requieren, propongo los siguientes:
1) Eliminar totalmente el financiamiento con recursos públicos a partidos/campañas, eliminar también totalmente todo tipo de propaganda electoral para promover a personas o partidos políticos o servidores públicos.
2) Eliminar todas las restricciones que tramposamente, han puesto los partidos políticos a las iniciativas/consultas populares y a las candidaturas independientes, así cómo a los requisitos para formar un partido u organización políticos, limitándolo únicamente a un simple aviso a la autoridad electoral.
3) Emitir una ley de revocación de mandato por medio de referendo, que incluya la eliminación de todos los fueros constitucionales, incluido principalmente el del presidente de la república.
4) Elección por medio de voto directo y secreto, de jueces y magistrados de todos los niveles, así como del procurador general de la república.
Con estas medidas la sociedad podrá empezar a construir, con las propuestas de especialistas de la sociedad civil y académicos las propuestas que deberán ser votadas en consultas populares y por medio de iniciativas populares.
Sin la herramienta de una consulta popular que pueda revocar cualquier reforma constitucional o secundaria los partidos podrán seguir gobernando en nuestro nombre y con nuestro aval indirecto, que no esté debidamente sustentada con argumentos válidos y con el estudio y debida ponderación de toda la sociedad.
Si los partidos siguen disfrutando de recursos públicos ilimitados seguirán adueñados de toda la vida política del país dejando en la marginación no solo económica, también política a toda la población.
La elección de jueces y magistrados de todos los niveles del poder judicial, permitirá vigilar y premiar a aquellos servidores públicos en el ejercicio de esta alta responsabilidad que siempre debe estar al servicio de los intereses de la sociedad no a los de los grupos de poder.
El poder para construir un México digno está en cada voto, no lo desperdicies este junio 2015, absteniéndote de ir a votar solo refuerzas el poder tal como está. Expresa clara y contundentemente con un voto anulado, tu rechazo a seguir legitimando y manteniendo con vida artificial a un sistema que está muerto y en pleno estado de putrefacción y al que hay que enterrar a la brevedad por la salud del país.
